lunes, 12 de enero de 2009

Archivo Nro 32 : Hora y media en la "jaula" de Gaza


El eurodiputado español David Hammerstein narra a ADN.es su visita a la franja con una delegación del Parlamento Europeo

El eurodiputado verde español David Hammerstein

davidhammerstein.org

Hay que tener paciencia para hacer cola en la frontera egipcia, asumir los altos riesgos personales que suponen los bombardeos de Tsahal y estar preparado para ver cómo 1,5 millones de personas aglutinadas en 360 km2 se hunden en la miseria. Pero en el 17º día de la ofensiva israelí, aún se puede entrar en la Franja de Gaza.

Un grupo de ocho diputados del Parlamento Europeo y un senador italiano pasaron una hora y media el domingo en el territorio palestino para ver con sus propios ojos qué está pasando en Gaza. El único español del grupo, David Hammerstein, de Los Verdes, relata su experiencia a ADN.es en una conversación telefónica desde El Cairo.

- ¿Cómo consiguieron entrar en la franja de Gaza?

- Es muy difícil entrar. Tuvimos que asumir nuestras responsabilidades ante nuestras Embajadas y pasamos por la frontera egipcia en Rafah. No era una delegación oficial, sino una iniciativa ad hoc: nueve personas, entre ellas ocho eurodiputados de siete países y casi todos los grupos, y un senador italiano. Llegamos a la ciudad de Gaza y pudimos quedarnos entre las 14.00 y las 15.30 [del domingo]. Luego el responsable de la ONU que nos acompañaba nos dijo que prefería que volviéramos para contarlo... Somos los únicos europeos que hemos entrado en las últimas dos semanas.

- ¿Cómo está la población?

"Los niños están expectantes ante las bombas. Nosotros nos asustábamos, ellos no"

- Ha sido una experiencia fuerte, con bombardeos incluidos. La ciudad de Gaza es el tercer mundo. No ves coches, sólo carros con burros. Los niños van descalzos, no hay ningún producto. Las calles están llenas de basura, no hay agua potable y hay una dependencia absoluta de la ayuda humanitaria, que no es suficiente. Los niños están expectantes ante las bombas. Nosotros nos asustábamos, pero los niños no. Parecían muy contentos de vernos, nos abrazaban. Tampoco ves a hombres armados ni carteles de Hamás por las calles. Es imposible distinguir entre objetivos militares y zonas civiles en unas calles tan estrechas. Los edificios oficiales ya han sido bombardeados todos. La población está deprimida y al borde de un ataque de nervios.

- ¿Cómo resisten a los bombardeos?

"Israel no respetó la tregua humanitaria de tres horas"

- Cuando nosotros estuvimos, la tregua humanitaria de tres horas no fue respetada. Los israelíes envían panfletos en árabe a los palestinos para decirles que busquen un refugio porque van a bombardear. Pero no hay ningún refugio, es casi imposible, Gaza es una jaula.

- ¿Qué puede hacer la Unión Europea?

- La UE da ayuda humanitaria, pero sigue siendo un enano político. Debería condicionar su ayuda al respeto de los derechos humanos y a gestos de paz. La UE debe dejar de ser un mero pagador.Yo animo a que otros responsables políticos vayan a Gaza, los palestinos estaban muy contentos de vernos. No se puede cruzar una línea roja, que es atentar contra la población civil. Nosotros queremos que se imponga una resolución internacional para que se respete el derecho internacional humanitario, lo quieran o no Israel y Hamás. Lo vamos a explicar en los próximos días en el Parlamento Europeo, queremos una resolución muy fuerte.

-¿Y España?

- El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, llegará hoy a El Cairo y está previsto que hablemos con él. También quiero decir que la ausencia de la prensa internacional en la franja es un hecho gravísimo. Los ciudadanos, los españoles por ejemplo, no pueden recibir información en su idioma sobre lo que pasa. Entonces eso se ve como una guerra de propaganda de ambas partes.

domingo, 4 de enero de 2009

Einstein, Israel, Gaza


Juan Gelman.jpg
Por:
Juan Gelman

El pasado sábado 27, a las 11.30 hora local, 50 cazas de combate israelíes demolieron unos 50 puntos de Gaza en tres minutos. Fue una violación de los Diez Mandamientos y de la santidad del sabbath, pero tal vez no se apliquen cuando de matar palestinos se trata: centenares en esta ocasión y más de mil heridos. Hay diferentes puntos de vista sobre las razones de esta matanza brutal. Tel Aviv asegura que es una represalia por la ominosa práctica de Hamas de lanzar cohetes al territorio israelí. Analistas varios opinan que más bien tiene que ver con las próximas elecciones en Israel, donde todavía es primer ministro –interino y renunciante por corrupción– Ehud Olmert. Los hechos históricos indicarían otra cosa: se trata del nunca olvidado intento de reconstruir el “Gran Israel” echando a los palestinos de su tierra.

Ben Gurion, que inauguró el cargo de primer ministro del flamante Estado de Israel, aceptó la partición de Palestina en territorios israelíes y territorios palestinos que la ONU estableció en 1947. Pero tenía un viejo pensamiento de fondo: en carta a su mujer confió que un Estado judío “parcial” –un proyecto de 1937 del ocupante británico que nunca se llevó a cabo– era sólo un comienzo y que planeaba organizar un ejército de primera y utilizar la coerción o la fuerza para absorber toda la extensión del país (Letters to Paula and the Children, David Ben Gurion, University of Pittsburg Press, 1971, carta de fecha 5-12-37, págs. 153-57). Esto se cumplió con la ocupación militar israelí de los territorios palestinos desde 1967 a la fecha. En el 2006, Tel Aviv se “retiró” de Gaza, a la que impuso un cerco implacable. El triunfo de Hamas en las inobjetables elecciones de ese año disgustó a Israel: un Estado que se dice democrático no tenía por qué respetar la democracia cuando de palestinos se trata.

Olmert es del partido Kadima, una escisión del derechista Likud, del que no se diferencia mucho, como prueban las guerras que sigue desatando. El Likud, a su vez, desciende del Herut, organismo que dio forma política al grupo paramilitar de Menahem Begin, también primer ministro de Israel (1977-1983). Los nombres cambian, pero la contumacia no. En diciembre de 1948, a siete meses de la declaración de independencia de Israel, Begin visitó EE.UU. y causó reacciones dispares. Por ejemplo, la de Albert Einstein, Hannah Arendt, el rabino Jessurun Cardozo y otros 26 destacados intelectuales judíos estadounidenses. Consta en una carta abierta que el New York Times publicó el 4-12-48.

El texto comienza así: “Entre los fenómenos políticos más inquietantes de nuestra época figura la aparición, en el recién creado Estado de Israel, del ‘Partido de la Libertad’ (Tnuat Herut), un partido político estrechamente emparentado con los partidos nazifacistas por su organización, sus métodos, su filosofía política y su demanda social. Fue creado por los miembros y partidarios de la ex Irgun Zvai Lemi, una organización terrorista de extrema derecha y chauvinista en Palestina. La visita actual a EE.UU. de Menahem Begin, jefe de ese partido, ha sido evidentemente calculada para dar la impresión de un sostén estadounidense a su partido y para cimentar los lazos políticos con los elementos sionistas conservadores de EE.UU.”.

Continúa así: “Muchos norteamericanos de reputación nacional han prestado su nombre para acoger esa visita. Es inconcebible que quienes se oponen al fascismo en el mundo entero, muy correctamente informados sobre el pasado y las perspectivas políticas de M. Begin, puedan sumar sus nombres y apoyar al movimiento que él representa”. Señala que es preciso informar a la opinión pública del país sobre el pasado y los objetivos de Begin –“uno de los que han predicado abiertamente la doctrina del Estado fascista”– para no dar la impresión en Palestina de “que una mayoría de EE.UU. respalda a elementos fascistas en Israel”. A continuación menciona la matanza que las fuerzas israelíes provocaron en la aldea árabe de Deir Yassin, “que no había participado en la guerra y que incluso había combatido a las bandas árabes que querían convertirla en su base de operaciones”. Precisa: “El 9 de abril (de 1948), bandas de terroristas (israelíes) atacaron esa pacífica aldea, que no era un objetivo militar, asesinaron a la mayoría de sus habitantes –240 hombres, mujeres y niños–- y dejaron a algunos con vida para hacerlos desfilar por las calles de Jerusalén. Invitaron a todos los corresponsales extranjeros a ver las montañas de cadáveres y los destrozos causados en Deir Yassin”. El texto acusa a Herut de preconizar en el seno de la comunidad judía una “mezcla de ultranacionalismo, misticismo religioso y superioridad racial”, signo indudable de un partido fascista para el cual el terrorismo “es un medio para alcanzar su objetivo de ser un ‘Estado líder’”. Agrega: “Es más trágico aún que la alta dirección del sionismo estadounidense se haya negado a hacer campaña contra los designios de Begin”. Han pasado 60 años desde que se publicó esta carta que Einstein firmó. ¿Habrá perdido actualidad? Muchas cosas cambiaron en Israel desde entonces. Su objetivo central, no.