miércoles, 25 de noviembre de 2009

Archivo Nro 52: Un nuevo envio del Prof. Norberto Ovando

La profundidad de los Océanos están rebosantes de vida

El océano es un lugar asombroso que alberga una diversidad de especies y ambientes quizá mayor que la terrestre. Sin embargo es aún bastante desconocido sobre todo en las zonas más profundas.

Por Prof. Norberto Ovando *



Un equipo de científicos internacionales, por primera vez ha catalogado 17.650 especies marinas, muchas de ellas desconocidas hasta ahora, que sobreviven en el fondo de mares y océanos, en un mundo situado entre los 200 y los 5.000 metros de profundidad, donde no llega la luz del Sol.

En el proyecto participan 344 científicos de 34 naciones pertenecientes a la Organización «Censo de la Vida Marina» -CVM- (http://www.comlsecretariat.org/). El Censo de la Vida Marina es una red global de investigadores de más de 80 países involucrados en una iniciativa a diez años plazo que persigue evaluar y explicar la diversidad, distribución y abundancia de la vida marina - pasada, presente y futura - de los océanos del mundo.

Los investigadores trabajaron en la denominada «zona de crepúsculo», donde la ausencia de luz impide el proceso de fotosíntesis y, por lo tanto, la existencia de una flora activa, para ello, utilizaron cámaras de inversión profunda, sónares y

otras tecnologías de vanguardia para observar a las diferentes especies El equipo expresó su sorpresa por la diversidad de la vida incluso en las profundidades abisales, hasta los 5 kilómetros.



Entre la diversidad de fauna hallada, los investigadores destacaron la presencia de un octópodo, este pulpo de dos metros de longitud vive a 1,5 kilómetros de profundidad en aguas del centro del océano Atlántico y fue bautizado como «Dumbo» por las largas aletas con forma de orejas que utiliza para desplazarse. Otra especie que llamó mucho la atención fue la de un gusano marino que fue sorprendido mientras ingería crudo petrolífero en aguas del Golfo de México. Cuando fue sacado del fondo marino por el brazo de un robot el crudo manaba a raudales del gusano.

El doctor Robert Carney, pionero en el descenso a las profundidades marinas con submarinos es uno de los responsables del proyecto por la Louisiana State University en Baton Rouge (EEUU), destacó que la gran mayoría de los animales recogidos de los fondos abisales son nuevas para la ciencia y que de los 680 especímenes de copépodos (una especie de crustáceos maxilópodos muy pequeños) que se recogieron sólo se conocían siete”.

El doctor Paul Snelgrove, director del Departamento de Ambientes Marinos a grandes profundidades de la Universidad Memorial de Terranova (Canadá), expresó su preocupación por el impacto que el cambio climático está teniendo en esa cadena alimentaria. Según el científico, “la caída de la productividad alimentaria en la superficie está empezando a notarse en el fondo marino con cantidades cada vez más limitadas de alimentos. Estamos observando que menos materiales caen hacia el fondo”.

Tras diez años de investigaciones, el Censo concluirá en octubre de 2010, cuando el proyecto se haya abordado en los cinco océanos a través de más de 210 expediciones y se presente el primer listado de la vida oceánica. Estas expediciones incluyen el primer viaje MAR-ECO realizado entre octubre y noviembre de 2009, en el que se exploró la falla Atlántica-Media del sur de Ecuador, fruto de una colaboración entre Rusia, Sudáfrica, Brasil y Uruguay.

Las profundidades de los océanos albergan una gran biodiversidad y los científicos como la industria pesquera saben que las profundidades rebosan de formas de vida, en gran parte aún por descubrir.

Las especies abisales son excepcionalmente vulnerables a la extinción por sobrepesca por varios motivos: viven en ambientes que raramente sufren alteraciones, tienden a tener un crecimiento lento, presentan una maduración tardía y suelen ser especies endémicas.

Mercurio en los peces

Las emisiones de mercurio originadas en Asia y en la atmósfera son absorbidas por organismos de la cadena alimentaria de ciertos peces como el atún

Investigadores, oceanógrafos y geólogos de la de la Universidad de Hawai en Mânoa (UHM) y de la Facultad de Ciencias y Tecnología Terrestre y Oceánica (SOEST), demostraron por primera vez que los depredadores de las profundidades del océano tienen niveles mayores de mercurio que los que se alimentan más cerca de la superficie. Estos resultados fueron publicados en agosto de 2009 en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

El mercurio ingresa en las cadenas alimentarias en mar abierto y se acumula en los organismos vivos, provocando que haya mayores niveles en los peces depredadores más grandes. Investigaciones anteriores revelaron, además, que las aguas oceánicas más profundas contienen mayores cantidades de mercurio que las superficiales.

Los resultados de este nuevo estudio demuestran que los grandes peces pelágicos, como el atún patudo, el pez espada y tiburones que se alimentan en las profundidades marinas, tienen niveles elevados de mercurio, en relación con las especies que habitan las aguas más superficiales.

Elsie Sunderland de la Universidad de Harvard, dijo que “el 40% de la exposición de los humanos al mercurio en Estados Unidos se produce a través del consumo de atún”

Protejamos las profundidades marinas

La humanidad ha arrojado sus desperdicios al mar desde hace milenios. A pesar de su inmensidad, la contaminación actual de los mares está afectando de manera muy grave al ecosistema marino. Los vertidos, en muchos casos tóxicos, la falta de legislación del transporte de sustancias peligrosas por vía marítima o el cambio climático son agresiones que cada día soportan los océanos.

Para saber el impacto que está teniendo el calentamiento global en la vida marina, necesitamos tener la información sobre lo que existe actualmente, y poder compararlo en unos años, con lo que ha cambiado.


Es imprescindible la declaración de una moratoria inmediata que detenga la pesca de arrastre de profundidad en Aguas Internacionales. Esta moratoria daría a Naciones Unidas el tiempo suficiente para coordinar un proceso que detenga la destrucción de los fondos marinos y valore la extensión de su biodiversidad. Así la ONU podría desarrollar medidas para su conservación y regular una explotación de forma equitativa y sostenible.

* Vicepresidente / Asociación Amigos de los Parques Nacionales – AAPN –

Experto Comisión Mundial de Áreas Protegidas – WCPA – de la UICN.

Red Latinoamericana de Áreas Protegidas – RELAP –

sábado, 14 de noviembre de 2009

Archivo Nro 51: El desierto de Patagones (Argentina)